Es un tema complicado. Aunque todo el mundo alega ser honesto en la entrevista, la realidad es que decimos muchas mentiras blancas. ¿Por qué? Casi siempre nace desde nuestra propia inseguridad y el deseo de generar una buena impresión. Lamentablemente, no nos damos cuenta de las consecuencias. «pero una mentirilla no le a hacer daño a nadie». Si hace daño, y es a usted. Yo siempre digo que buscar trabajo es como buscar novia/o: ¿a usted le gustaría iniciar una relación con una mentira? Puede que nunca se enteren, pero, usted siempre lo sabrá. Su nueva relación tendrá bases falsas. La honestidad nos da seguridad y firmeza en nuestra respuesta. Cuando decimos la verdad, estamos haciendo una invitación para que confíen en nosotros. Uno de los factores determinantes en la contratación es la percepción de confiabilidad que se genera. Con una mentira, el castillo de naipes se cae. Yo creo mucho en el karma y lo que mal comienza, mal termina. ¿Cuál es la necesidad? Acaso no es usted suficiente que debe inventarse algo. Es una muestra de carácter ¿Es usted siempre honesto? O que tipo de trabajador es… Es irrisorio pensar que una carrera exitosa va a iniciar en mentiras. «es una mentirilla» puede ser. «no le va hacer daño a nadie» bien. Pero siempre, como todos los hábitos, se comienza poco a poco. La mejor estrategia siempre es ser honesto. A una persona que miente se le nota la inseguridad y en entrevistador empieza a perder confianza. No se arriesgo e inicie su relación laboral con el pie derecho.
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