¿A dónde más iría? Claro, hoy es muy tentador quedarse en la cama durmiendo, pero a las 10 de la mañana ya estaría desesperado, sobre todo si esta viendo “muy buenos días” Ahí está la pregunta: si no fuera a su trabajo normal, ¿a donde iría? ¿Qué haría? Muchos dicen que les gustaría viajar: después de 6 meses uno quiere estarse en un sitio. Otros dicen que no harían nada: el ocio es muy aburrido, solo la actividad le puede brindar a uno satisfacción. Entonces, ¿qué haría? Ahí está la pregunta. ¿A que le dedicaría su tiempo libre? ¿Qué le brindaría satisfacción personal y profesional? El poder real es ser el amo de sus decisiones y acciones. ¿Esta haciendo lo que le gusta? Si no, ¿Qué está esperando? No es fácil, por múltiples razones. Sin embargo, no quiere decir que no sea posible, solo que realmente debe estar dispuesto a esforzarse por sus sueños. Encuentro 2 problemas grandes para encontrar ese trabajo que apasione, que genere propósito: 1) ¿Cuál? 2) ¿Cómo? 1) ¿Cuál?: La gran mayoría de personas saben que quieren hacer algo que les gusta pero no tienen idea de que es eso. La gran mayoría de veces es por falta de introspección. Simplemente no han hecho el trabajo de sentarse y mirar lo que les llama la atención y salir a probarlo. Simplemente quieren que alguien llegue y les diga “tu pasión es…”. Eso no pasa. 2) ¿Cómo?: Bienvenida la creatividad, el riesgo y el rompimiento de paradigmas. El cómo lo podemos construir, si lo encontramos en el mundo actual, excelente, es muy afortunado, solo salga a conseguirlo/construirlo, siga el mapa. Por el otro lado, si no conoce nada parecido o si no lo ve, solo quiere decir que tiene que crearlo. Puede que no haya mapa, que nadie lo haya intentado: a dibujar usted su propio mapa. Si quiere una vida de propósito, recuerde que son sus decisiones y acciones las que dictan si va en ese camino o no.
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